En medio del conflicto diplomático entre el Gobierno argentino y el régimen de Nicolás Maduro, la situación en la Embajada de Argentina en Caracas ha empeorado. Desde ayer, el régimen venezolano ha intensificado su hostigamiento a la sede diplomática, cortando el suministro eléctrico en un aparente intento de intimidar a los seis opositores que se encuentran asilados allí.

Estos dirigentes opositores, vinculados a María Corina Machado y Edmundo González Urrutia, han estado refugiados en la embajada desde marzo debido a amenazas del gobierno chavista. Esta mañana, Pedro Urruchurtu Noselli, coordinador nacional de campaña de Machado y González Urrutia, denunció en sus redes sociales el corte del suministro eléctrico por parte de la Corporación Eléctrica Nacional (Corpoelec), responsable del servicio en Venezuela. «URGENTE!!! Funcionarios de Corpoelec acaban de cortar el suministro eléctrico en la residencia de la embajada de Argentina en Caracas, donde nos encontramos los 6 asilados», escribió Urruchurtu.

La Cancillería Argentina ha condenado este acto de hostigamiento. En un comunicado, Diana Mondino, Canciller argentina, expresó el repudio de Argentina al corte de electricidad y recordó al gobierno venezolano su obligación de proteger las instalaciones diplomáticas y el personal en ellas. Mondino también hizo un llamado a la comunidad internacional para garantizar el cumplimiento de las normas diplomáticas.

Contexto de la crisis

La tensión se ha intensificado tras las elecciones presidenciales en Venezuela, que el gobierno argentino y varios líderes internacionales han calificado de fraudulentas. Nicolás Maduro, tras ser proclamado presidente reelecto, ha respondido con medidas represivas, incluyendo el retiro de embajadores de países que cuestionan los resultados y la expulsión de diplomáticos argentinos. Este conflicto ha llevado al régimen a asediar la residencia diplomática argentina, con episodios de violencia como el intento fallido de entrada de oficiales de la Dirección de Acciones Estratégicas y Tácticas (DAET) a la embajada.

El Gobierno argentino, a través de sus gestiones internacionales y la intervención de diplomáticos de Brasil, ha logrado evitar una escalada mayor, aunque la situación sigue siendo grave. Desde anoche, se ha formado un cordón humano alrededor de la embajada por iniciativa de Machado, buscando proteger la sede y los opositores allí refugiados.

El conflicto no muestra señales de amainar y podría seguir escalando si no se encuentran soluciones diplomáticas efectivas. La comunidad internacional observa con preocupación cómo se desarrolla esta crisis en el corazón de Caracas.